jueves, 21 de abril de 2016

Un rico café sabe a México


La idea de como comencé este blog fue con lo que pasa alrededor de una taza de café.   Es una maravillosa forma de meterse en un estado de animo o complementar el que ya se tiene, tanto para el cerebro como para el espíritu.  Un rico café puede disfrutarse cuando estas solo o complementar una deliciosa platica. Esta en momentos felices, estresantes, dolorosos.  Su aroma hace que revivas momentos, la temperatura puede refrescarte o mantenerte caliente, pero su sabor... es algo estimulante en cada sorbo.

Yo no soy una gran catadora de café, pero tengo la bendición que mis papilas gustativas han aprendido a diferenciar y entender las notas de distintas cosas.  Aun recuerdo en la universidad, cuando estuvimos haciendo una degustación a ciegas pude descifrar todos los refrescos de diferentes marcas. En la última dude, porque no me daba un sabor conocido y yo solo podía decir, "este sabor es raro, me sabe a coca y me sabe a pepsi, no se cuál es" y lo que hicieron fue mezclar las dos!

Por eso cuando bebo una taza lo relaciono algunos aromas y detalles en los que se envuelve.  Esto viene del lugar donde se cultiva, idealmente es en regiones o lugares altos y con ciertas condiciones climáticas ideales, pero el grano es tan noble, que puede darse en lugares muy inesperados.  Antes de cosecharse, el grano absorbe los aromas del ambiente, por ejemplo, el café chiapaneco generalmente tiene un sabor terroso o húmedo, pero con notas aromáticas de las plantas y ambiente de la región.  El café que se cultiva en lugares como Hawai (por mencionar algo diferente) toma un sabor y aroma volcánico.  Sé que suena chistoso, pero es cierto.

Hablar del café mexicano es importante hablar de sabor, notas, acidez, intensidad particular. Dependiendo de la región, puede ser más o menos ácido, pero las notas son muy similares.  En cuanto a la intensidad, a diferencia de un café colombiano, es mucho más suave, pero de manera local, el chiapaneco es menos intenso que un café oaxaqueño y este a su vez es menos fuerte que el de Veracruz.


Pronto les contaré un poco más de cómo ser un catador de café sin ser expertos, pero si podrán identificar y apreciar otras cualidades que quizá no habían notado.


Excelente día, acompáñenlo de un café.
 


 

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